Publicado en TLM
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El madrileño Teatro de la Abadía estrena el jueves 21 de diciembre, ‘NOSOTROS‘, el último proyecto de Rosa Torres-Pardo junto al actor Mario Gas, con la participación extraordinaria en esta ocasión de Luis García Montero, autor del guion en el cual palabra y música realizan un viaje hacia donde la voz pueda cantar y contar.
NOSOTROS, se representará también el viernes 22 de diciembre y tiene previsto programarse a lo largo del 2024 en diferentes ciudades españolas.
Jueves 21 y viernes 22 de diciembre | Teatro de La Abadía
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NOSOTROS
Por Rosa Torres-Pardo
«Cuando la realidad se nos presenta en toda su crudeza. Cuando vivimos momentos de pérdida, de desesperanza, o cuando vivimos con prisa y creemos que no hemos alcanzado aquello que nos habíamos propuesto y no encontramos sentido a nada, es un buen momento de parar, de mirar a nuestro alrededor y comprender que allá donde existe la música, la poesía, allá donde la voz pueda cantar y contar, existe todavía un lugar para crear, para dar lugar a la magia y aunque sea por un tiempo limitado, vivirlo y disfrutarlo con emoción y esperanza. Eso es lo que hace el arte, encontrarle el sentido a la vida.
Hace tiempo que colaboro con Luís García Montero y he disfrutado mucho con su poesía. Hicimos juntos funciones como “La vida rima”, “Desconcierto” o “Del clásico al cabaret”. También hacía tiempo que deseaba encontrar ocasión de trabajar con el actor y director Mario Gas. Finalmente compartiremos música y poemas en un escenario.
Independientemente de mi trabajo con la música y el piano, he buscado incansablemente nuevos espacios, sea con la danza o con otras artes más allá de la música, porque me llevan a un lugar creativo distinto e interesante. Dialogar como en este caso, con un gran poeta y con un gran actor no solo me permite desarrollar mi trabajo, sino que me enriquece y me hace disfrutar enormemente de mi profesión».
Luís García Montero
“Dicen que la poesía ha muerto. Quizá sólo esté desaparecida. Habrá que salir a buscarla por las habitaciones de la música y las palabras, por los pasillos de la emoción, por esa parte de nuestra memoria y nuestros sentimientos que nos saca a la calle y nos sienta a conversar, a cantar, a pensar, a vivir cerca de nosotros mismos. Poner despacio las manos sobre un piano, poner los labios y los oídos en cada palabra. Comprender lo que sucede en un salón de estar, en una plaza o en un teatro”.
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NdeP
