Euskadiko Orkestra estrena una obra doble de Pascal Gaigne relacionada con la pandemia

Publicado en TLM

Segundo programa de conciertos de la temporada

Entre el 28 de octubre y el 4 de noviembre Euskadiko Orkestra ofrecerá un nuevo programa de conciertos con múltiples argumentos de peso: el importante estreno de una nueva obra de Pascal Gaigne (que en realidad se trata de dos obras en una) inspirada en la pandemia; la incorporación de miembros de la EGO y de Musikene a las filas de la orquesta; la interpretación de dos de las sinfonías más desconocidas de Tchaikovsky; y la dirección de Jaume Santonja.

La orquesta ofrecerá dobles sesiones de este programa, cada día a las 18:00 y a las 20:15: el 28 y 29 de octubre en el Auditorio Kursaal de San Sebastián; el 2 de noviembre en el Teatro Principal de Vitoria; el 3 de noviembre en el Palacio Euskalduna de Bilbao; y el 4 de noviembre en el Auditorio Baluarte de Pamplona.

Días 28, 29 de octubre – 2, 3 y 4 de noviembre | Varias ciudades

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Hay entradas a la venta para todas las sesiones de 10 a 35 euros.

Estreno de la obra doble de Pascal Gaigne

Pascal Gaigne se ha convertido en uno de los compositores vascos más celebrados gracias a sus trabajos para la gran pantalla, con reconocimientos tan prestigiosos como el Premio Goya que recibió por su banda sonora para la película Handia.

Euskadiko Orkestra, que ha interpretado a menudo la música cinematográfica de Gaigne, ha querido mostrar esta vez esa otra faceta de su talento, con el estreno de dos nuevas obras escritas por encargo de la orquesta, Urrutiko arimak y Urruneko azalak, compuestas durante la pandemia y que reflexionan en torno a ella.

Antes de centrarse en la música para cine (suma ya alrededor de 100 trabajos para largometrajes, cortos y documentales), Gaigne estuvo muy ligado a la música popular, y acompañó durante muchos años a cantantes como Amaia Zubiria o Joseba Tapia. Menos conocida resulta, quizá, su música para las salas de conciertos, aunque la hayan programado orquestas como las de Tenerife, Málaga o RTVE y en países como EE.UU., Japón, China y Finlandia.

Urruneko izakiak es un díptico que, circunstancialmente, nació de las consecuencias que trajo consigo la pandemia de la Covid-19. Al principio, Euskadiko Orkestra le había encargado a Gaigne la segunda parte del tríptico Hypnos variations, cuya primera obra se estrenó en marzo del 2016, durante el concierto de debut de Robert Treviño con la orquesta.

En aquella creación que abordaba el mito de Hypnos, el dios del sueño, Gaigne rendía homenaje “al mundo fascinante e hipnótico de los Lekeitios” de Mikel Laboa. Sin embargo, dadas las limitaciones que impuso la pandemia, Gaigne y Euskadiko Orkestra consideraron que quizá resultase imposible reunir a una gran orquesta sobre el escenario, así que Gaigne propuso una solución muy ingeniosa: escribir dos obras que usan cada una la mitad de los instrumentos de la orquesta y que se pueden tocar en conjunto o de forma independiente. Pero lo más curioso es que estas dos piezas pueden superponerse, dando como resultado una tercera obra que posee ya la plantilla orquestal completa.

Las dos piezas que forman el díptico son Urruneko azalak y Urrutiko arimak. Tal y como anuncian sus títulos, ambas obras reflejan la particular situación que trajo consigo la pandemia, en la que las relaciones personales se vieron sometidas a la distancia, generando con ello una sensación de alienación y nostalgia que Gaigne ha querido atrapar en su interior.

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Música nueva e infrecuente con Jaume Santonja

Tras haber asumido la responsabilidad de varios conciertos durante la compleja Temporada 20/21, Jaume Santonja, director asistente de Euskadiko Orkestra, vuelve a subir al podio de la orquesta para liderarla en un concierto que tiene como lema principal el descubrimiento de música nueva e infrecuente.

Junto al estreno absoluto de Pascal Gaigne, y siguiendo la senda del descubrimiento que vertebra esta Temporada de Euskadiko Orkestra, Jaume Santonja presentará a continuación dos sinfonías tempranas de Tchaikovsky: la primera y tercera.

Se trata de sinfonías menos conocidas que las que forman su célebre trilogía final pero imprescindibles para comprender la evolución creativa de este autor ruso habitual en la programación de cualquier orquesta.

Os dejamos la explicación de este programa en palabras de nuestro director titular, Robert Treviño:

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