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El Festival Internacional de Jazz de Madrid JAZZMADRID, organizado por el Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento, ha puesto fin a una edición histórica tanto en la cantidad de conciertos como en la calidad de la música en ellos disfrutada. A diferencia de las ediciones de 2020 y 2021, marcadas por la pandemia, en JAZZMADRID22 se ha apostado por reflejar la definitiva normalidad en la que ya vive Madrid. De hecho, el porcentaje de artistas extranjeros aumentó hasta los niveles de ediciones anteriores al Covid, si bien se ha mantenido una relevante presencia de propuestas locales, tal como ha venido siendo constante en todas las ediciones del festival.
Teniendo en cuenta únicamente la asistencia a los tres centros municipales participantes en JAZZMADRID22 –Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa, CentroCentro y Condeduque– un total de 10.909 espectadores han asistido a los conciertos del festival, lo que supone un incremento de más del 10% respecto a la pasada edición, siendo el incremento más espectacular el del centro Condeduque (45,25%).
Un gran esfuerzo colectivo
Todo esto ha sido posible gracias un gran esfuerzo colectivo. A la espectacular programación de las tres sedes principales de la sección oficial –Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa, CentroCentro y Condeduque–, se ha sumado la colaboración con diferentes entidades públicas y privadas.
Entre las primeras, el CNDM (Auditorio Nacional de Música) y la Biblioteca Nacional, así como los Institutos de Cultura Francés e Italiano. Las iniciativas privadas han llegado nuevamente de la mano de los responsables de Villanos del Jazz, con una programación realizada en diferentes lugares de Madrid, aunque el teatro Pavón haya vuelto a ser la sede principal para casi todos sus actos.
Completaron la oferta las iniciativas municipales 21 Distritos y el Festival de Jazz de Ciudad Lineal, así como Jazz Círculo, del Círculo de Bellas Artes, y todas las previstas por el ciclo Jazz con Sabor a Club, que tuvieron lugar en diferentes salas y clubes de la ciudad.
Noches para el recuerdo
La buena y generosa afición capitalina, si se la consultase, estaría probablemente de acuerdo en convenir que hasta una docena larga de conciertos excepcionales habrían justificado la programación al completo.
Las propuestas del trompetista Paolo Fresu; la de la orquesta del cantante cubano Alain Pérez; el saxofonista Immanuel Wilkins; la cantante Cyrille Aymée; los dúos conformados por Richard Bona y Alfredo Rodríguez, y el de los pianistas Chano Domínguez y Gonzalo Rubalcaba; el grupo de Ernesto Aurignac, o la Orquesta Matosinhos, con Pedro Guedes al frente y con invitados como los pianistas Ethan Iverson y David Virelles, son solo algunas de ellas. Todas, convocatorias comprometidas con el avance del jazz.
Los recitales vibrantes de la terna de libreimprovisadoras AkiTakase, Matana Roberts e Ingrid Laubrock (esta última a dúo con Andy Milne), y los conciertos del cuarteto del cellista Erik Friedlander y de los Five Elements, de Steve Coleman, han sido otras de las grandes apuestas de la muestra.
Y muy agradecible ha resultado la comparecencia del dúo de guitarristas Martin Taylor y UlfWakenius; la de la Banda Sinfónica Municipal de Madrid, con el maestro Jan Cober en la dirección y el armonicista Antonio Serrano como solista invitado; la de los nuevos grupos del histórico baterista Billy Cobham, y el bailaor Nino de los Reyes; la fiesta-homenaje que organizaron sobre la escena los antiguos componentes de la Big Band de Bob Sands, con Quique Gómez como invitado especial, o los recitales de cantantes como José James y Kurt Elling, este último acompañado por el guitarrista Charlie Hunter. Cabe destacar también la vivificante comparecencia del grupo de la cantante maliense Oumou Sangaré.
Los más jóvenes
En este apartado, las presentaciones de Lucía Fumero y Carlos Sarduy (ambos procedentes del circuito de Artistas en Ruta de la AIE); el grupo en régimen de residencia de CondeDuque (Manuel Borraz), o la Creativa Grand Ensemble, de la Escuela de Música Creativa, alcanzaron en diversos momentos muy buenos niveles de expresividad.
Y las presencias de jóvenes profesionales como los componentes de la Big Band del Conservatorio Profesional de Arturo Soria; Melissa Aldana; Ariel Brínguez, o el grupo Rouge, de la cantante francesa Madeleine Cazenave, fueron muy interesantes también por lo novedoso de sus iniciativas.
Las perlas musicales del festival
Si bien es cierto que siempre es complejo categorizar, se podrían destacar, sobre todo, conciertos tan rotundos como el interpretado por del dúo conformado por el pianista dominicano Michel Camilo y el guitarrista almeriense Tomatito; el estreno de la cantante Melody Gardot, y la presentación en solitario del histórico pianista Abdullah Ibrahim, un músico señalado en las antologías del jazz, el intérprete mayor de África, y una de las leyendas, todavía en pie y en activo, del jazz universal. Las tres propuestas –muy diferentes, antagónicas incluso– han sido perlas artísticas para anotar en nuestras biografías.
Jazz en toda la ciudad
A esta programación en los centros culturales municipales –Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa, CentroCentro y Condeduque– se han sumado noches tan deliciosas como las protagonizadas por Marco Mezquida y el Pedro OjestoQuartet & María Mezcle; los del pianista Moisés P. Sánchez y la cantante Dianne Reeves, en el Auditorio Nacional de Música, y, aún, todos los nombres importantes que han comparecido en la escena del Teatro Pavón, en el ciclo Villanos del Jazz (Al Di Meola, YounSunNah, Cecile McLorin Salvant, Avishai Cohen, Steve Turre, Kenny Garrett, Julian Lage o MakayaMcCraven).
En las iniciativas municipales del Festival de Jazz de Ciudad Lineal y de 21 Distritos, la afición madrileña ha podido disfrutar conciertos como los de Carmen París, Adam Ben Ezra, Antonio Lizana, Federico Lechner, Julián Olivares, María Parra o el Taller de Gestión de Emociones a Través del Rap, entre otros.
Y, como no podía ser de otro modo, los clubes y salas de música en vivo de la ciudad han engrandecido la fiesta, con sesiones como las de Víctor Correa & Víctor Antón, PaholaCrowly y Mayte González, en el ciclo Jazz con Sabor a Club.
Toda esta descarga musical ha vuelto a permitir seguir situando a Madrid en el mapa del jazz europeo, codo con codo con citas tan veteranas y enjundiosas como las de Umbría en Italia, Montreux en Suiza, o el Jazzaldia de San Sebastián. JAZZMADRID sigue configurándose como uno de los mejores certámenes subalpinos que el jazz es capaz de producir.
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