Un nuevo informe de Goldman Sachs proyecta que los ingresos globales de la música grabada ascenderán a los 41.000 millones de dólares para el 2030, con 34.000 millones de dólares de los generados por streaming; 4.000$ de derechos de comunicación pública; 700$ millones de ventas físicas y descargas; 500$ millones en sincronización y 1.200 millones en otras fuentes. Esto significa que los ingresos saltarán más de un 500% durante los 13 años próximos.
También prevé que el total de suscriptores de streaming pagado llegará a 847 millones para el 2030, un aumento de más de 700 millones en comparación con los datos de final de 2016.
Además, el informe hace mención a Universal Music y a Sony Music. En el caso de UMG, Goldman Sachs ha valorado a la compañía en 23.300$ millones – Un 16% más del actual que era de 19.500$ millones – y en el caso de SMG lo ha valorado en 19.800$ millones.
Aunque las predicciones de la firma de inversión sean muy a largo plazo, hay muchas señales que la industria de la música grabada avanza hacia esa dirección y es importante que este industria se perciba dentro de la comunidad financiera como un sector en crecimiento, lo cual puede impulsar a muchos otros actores dentro de la industria de la música global a crecer, a tener mayor inversión y una mayor innovación.
También un punto muy importante es el que refiere a los artistas y a los pagos por regalías, un aumento de 600 millones de suscriptores sin duda tendrá un impacto respecto a los ingresos que perciban por parte de los servicios de streaming.
Por último, si bien este informe de Goldman Sachs pone el foco en largo plazo de la industria de la música grabada, va a tener un efecto importante en los negocios a corto plazo especialmente en la compra-venta de catálogos y las inversiones que se están en la actualidad.