Orquesta de Cámara de Bormujos, presenta «Clasicismo: de París a Viena»

The black Mozart, Vanhal y Haydn

Este concierto está programado el viernes 25 de febrero por la Orquesta de cámara de Bormujos en el Espacio Turina de Sevila, dentro de la programación musical del Ayto. de Sevilla, con un repertorio que incluye obras de Saint-Georges, Vanhal y Haydn.

Con este concierto, la Orquesta de Cámara Bormujos (OCB) se consolida como una de las orquestas de cámara más estables de Andalucía Occidental, con 6 años de conciertos, difundiendo obras menos conocidas que las interpretadas habitualemente, pero que exigen la misma o mayor pericia en su ejecución.

Dentro del programa de este concierto, destaca saber la historia de Saint-Georges, el apodado actualmente como el «Mozart negro«, y que no muchos conocen. Su historia es singular, siendo hijo de una esclava y de su patrón, después se convirtió en uno de los músicos más importantes del París de finales del s. XVIII.

Viernes 25 de febrero a las 20:00 hs | Espacio Turina

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Programa

Chevalier Saint-Georges (1745-1799)
Sinfonía nº 2, op. 11, en re mayor
Obertura de su ópera cómica L´Amant Anonime.
Presto
Andante
Presto

J. B. Vanhal (1739-1813)
Concierto para contrabajo y orquesta en re mayor
Allegro Moderato
Adagio
Finale. Allegro

F. J. Haydn (1732-1809)
Sinfonía nº 59, en la mayor
Presto
Andante o più tosto Allegretto
Menuetto
Allegro assai

Sobre Chevalier Saint-Georges, el Mozart Negro

Joseph Bologne, mejor conocido como Chevalier de Saint-Georges (Guadalupe, 1745- París, 1799), fue un compositor del Clasicismo. Fue además virtuoso violinista, director de la orquesta más importante de París y campeón de esgrima. Llegó a impartir clases de clavecín de forma eventual a la reina María Antonieta de Francia.

Este compositor, de raza mulata, fue hijo de Georges Bologne Saint-Georges, un colono holandés que hizo su fortuna en las plantaciones, y su esclava Nanon, de origen senegalés. A pesar de ser hijo ilegítimo, su padre lo reconoció como hijo suyo, y le dio su mismo apellido.

En 1747, Georges Bologne, fue acusado (¿equivocadamente?) de asesinato, tras una disputa con un vecino, que murió tres días más tarde. Huyó con su esposa, además de su hijo y su amante, por temor a que estos dos tuvieran que ser vendidos. Dos años más tarde, beneficiándose de un indulto del rey francés, el padre de Joseph y la familia regresó a la colonia de Guadalupe, recuperando sus haciendas.

Luego se instalaron definitivamente en Francia en 1753. Al llegar a Burdeos, Joseph Bologne y su madre dejaron de ser considerados como esclavos, según las órdenes francesas del momento.

Varios años después, ya en París, al padre de Bologne se le otorgó un título nobiliario, lo que generó más oportunidades y un ingreso estable para la familia. Joseph mostró aptitudes para la esgrima y se matriculó para estudiar con el maestro de armas llamado La Boëssieère.

Siendo aún un simple estudiante, Bologne derrotó a Alexandre Picard, un maestro espadachín que lo había ridiculizado como «el mulato advenedizo de La Boëssière». Su padre lo recompensó con el regalo de un caballo y un carruaje.

Después fue nombrado chevalier (un caballero francés) y llamado el «mejor espadachín de Europa». En 1764, a la edad de 19 años, fue nombrado Gendarme de la Guardia del Rey y Caballero. Se convirtió en un joven apreciado por la aristocracia parisina. Lo apodaban desde entonces Chevalier Saint-Georges.

La música también formó parte de su educación aristocrática. Estudió con el violinista y compositor Jean-Marie Leclair, y también con el compositor François-Joseph Gossec. Este último nombrará más tarde a Joseph Bologna primer violín y luego director de su orquesta, el Concert des Amateurs.

Esta orquesta fue calificada en 1775 como «la mejor orquesta sinfónica de París y quizás de Europa» según el Almanaque de música del año. Saint-George se encargó un tiempo después del Concert Spirituel, una institución organizadora de conciertos musicales en París hasta 1790. También era el chef de la orquesta de “Le Concert de la Loge olympique”, otra de las sociedades musicales más conocida de París.

Su patrón, el Conde d´Ogny le pidió a Saint-Georges que le escribiera a Haydn, invitándole a tocar allí. Acordaron pagarle al compositor austríaco veinticinco luises de oro por cada una de las seis sinfonías (las números 82-87). A Haydn le pareció un precio colosal, pues nunca le había aportado sus sinfonías algún beneficio económico. Le pagaron además 5 luises de oro por las publicaciones de esas sinfonías en París.

Saint-George también consiguió, a través de la música, acercarse a la reina María Antonieta (para convertirse en tutora musical de esta última), al Duque de Orleans (que hará de Saint-George el primer masón negro), y al Príncipe de Gales.

Joseph Bologne también se codeó con la corte de Inglaterra. Al tratarse en 1777 de nombrar un director de la Academia de Música, Saint-George se encontró entre los candidatos a tal cargo.

Él propuso gestionar la Ópera según nuevos criterios estéticos y éticos. Luis XVI, informado de la camarilla, no nombró a nadie para la dirección de la Ópera. Lo cierto es que, Saint-Georges no alcanzó el nombramiento por haberse negado los artistas a aceptar la dirección de una persona de ascendencia africana.

Con la muerte del Duque de Orleans en 1785, Saint-Georges perdió a su gran protector. Visitó Londres realizando una exhibición de combates de espada en la Angelo’s Academy. Regresó a París en 1787. Después de seis meses del comienzo de la Revolución Francesa, Sant-Georges regresó a Londres en compañía del joven Duque de Orleans, que había sido obligado a llamarse Philippe-Egalité. Para ganarse la vida continúa con la exhibición de sus cualidades como espadachín.

En 1790 retornó a París empezando una gira por el norte de Francia con la actriz Louise Fusil y el trompista Lamothe. Dos años después, residente en Lille fue nombrado capitán de la Guardia Nacional. En el verano de 1792 se formó un cuerpo de tropa compuesta por un millar de soldados de raza negra, la Légion Nationale du Midi.

En 1793, durante la época conocida como la época del Terror, Saint-Georges fue relevado de su dirección, prisionero durante 18 meses y después de ser liberado se le prohibió estar cerca de sus legionarios.

Durante la difícil vida en la Francia revolucionaria vivió como un vagabundo, junto con el citado intérprete de trompa Lamothe. Durante un tiempo regresó a Saint-Domingue, el nombre que tenía entonces la colonia francesa convertida después de su independencia en 1804 en Haití. Allí casi pierde la vida a causa de la rebelión de los esclavos negros.

En 1797 se encontraba nuevamente en París logrando el cargo de director de una nueva formación musical, el Cercle de l’Harmonie, pero muere poco después en París, el 10 de junio de 1799 a causa de una infección.

Han quedado algunas obras de Chevalier Saint-Georger, como 6 sinfonías, 10 conciertos para violín y orquesta (algunos como los dos del op. 2 son realmente brillantes, publicados en 1800), además de 12 cuartetos y algunas obras de cámara. Hizo algunas óperas cómicas, de las que nos ha quedado la titulada L’Amant anonyme. Su obertura es en verdad su Sinfonía nº 2 en Re mayor, que se interpretará en este programa.

Vanhal y su concierto para contrabajo y orquesta

Siguiendo a Dittersdorf y Hoffmeister, Johann Baptist Vanhal añade otro punto culminante a la literatura para contrabajo con su único concierto para ese instrumento. La obra virtuosa ha permanecido solo mediante la copia de una parte de la misma, propiedad del famoso contrabajista Johannes Sperger (1750-1812).

Eso plantea algunas preguntas debido a las muchas adiciones posteriores en la parte solista (especialmente en lo que respecta a las transposiciones de octava). La obra fue especialmente diseñada para ser tocada con la «afinación vienesa» habitual en los días de Vanhal. Eso permite a los intérpretes tocar la obra de una manera más natural.

Vanhal nació en Nechanice, en Bohemia, formándose como violín y organista desde muy temprano. A la edad de 21 años, su mecenas la condesa Schaffgotsch, lo lleva a Viena, en 1760. Allí rápidamente se estableció como profesor de canto, violín y piano de la alta nobleza, y empezó a estrenar sus sinfonías. Durante los años 1762-3 parece que estudió con Ditterddorf, aunque ambos eran de la misma edad.

El barón Riesch patrocinó un viaje a Italia en 1769, para que Vanhal pudiera aprender el estilo de composición italiano, que estaba muy de moda. En ese viaje conoció a sus compañeros bohemios Gluck y Gassmann en Venecia y Roma respectivamente. En ese tiempo, Vanhal compuso algunas óperas, que se han perdido.

Después de su viaje a Italia, Vanhal regresó a Viena. Ocasionalmente estuvo a las órdenes del conde Erdődy, en la ciudad croata de Varazdin.

Alrededor de 1780, Vanhal dejó de escribir sinfonías y cuartetos de cuerda, y se centró en cambio en la música para piano y conjuntos de cámara de pequeña escala, misas y otra música de iglesia. Durante los últimos 30 años de su vida no trabajó bajo ningún patrocinio, probablemente siendo el primer compositor vienés en hacerlo. Durante estos años, más de 270 de sus obras fueron publicadas por impresores vieneses.

En la década de 1780 todavía era un participante activo en la vida musical vienesa. En 1782 conoció a Mozart, el cual admiraba las Sinfonías de Vanhal. Disfrutaba tocando música con Mozart. En 1784 llegaron a tocar juntos un cuarteto Vanhal, Mozart, Haydn y Ditterdorf.

Aunque a partir de 1787 parece que Vanhal dejó de actuar en público, sin embargo estaba económicamente bien, viviendo en buenos barrios cerca de la catedral de San Esteban. Murió en 1813, siendo un compositor anciano cuya música aún era reconocida por el público vienés. No se casó ni tuvo hijos.

Haydn y su sinfonía nº 59

Esta sinfonía fue escrita en 1768, justo dos años más tarde que su patrón, Nicolás Esterházy inaugurase su nuevo palacio, titulado Esterháza. Este nuevo lugar de residencia está a unos 55 kms de Viena, y se construyó sobre un antiguo pabellón de caza.

En 1768 se terminó precisamente el teatro de ópera, y otros edificios colindantes, como el alojamiento permanente para los músicos. La actividad musical de los Esterházy se trasladó desde entonces a ese palacio. En ese tiempo Haydn escribió la primera de las tres óperas de Goldoni, Lo Speziale.

La Sinfonía nº 59 tiene el subtítulo de “Fuego”, que como suele ocurrir, no fue una idea del propio compositor. Pero en este caso concreto, también se ha pensado que se hizo la obra como música incidental de una obra de teatro. La obra forma parte del movimiento Sturm und Drung que se puso de moda en Centroeuropa, adelantando algunos atisbos del posterior Romanticismo.

El primer movimiento puede parecer más bien un Finale, por estar a un tempo Presto. El tema principal consiste en notas repetidasLa obra tiene arrebatos de pasión, como las entradas en ff de las trompas en el movimiento lento. El tercer movimiento es un Minuetto convencional, y el último movimiento es corto pero enérgico. Presenta una fanfarria de trompas y escalas rápidas en las cuerdas.

Sobre Mattew Gibbon

Matthew Gibbon empieza sus estudios de contrabajo con 17 años, después de estar 10 años tocando el violonchelo. Menos de un año mas tarde gana plazas en todos los principales conservatorios en Inglaterra, y opta por seguir en el RNCM de Manchester.

Allí recibe clases de Duncan McTier, graduándose en 1990. Allí recibe varios premios y también empieza a trabajar con varios orquestas de la región, como el “BBC Philharmonic” y el “Royal Liverpool Philharmonic”. Durante sus inicios de vida profesional en Inglaterra tiene la suerte de acompañar a solistas como Yehudi Menuhin y Mistislav Rostropovich.

Antes de sacar la plaza de ayuda de solista de la entonces Orquesta Sinfónica de Sevilla en 1991, había tocado como solista de la “European Community Chamber Orchestra”, haciendo giras por Europa y America.

También ha sido invitado en la “Academy of St. Martin in the Fields”. En Sevilla ha formado parte de la plantilla de la ROSS desde que la orquesta se formó y ha sido profesor invitado con varios orquestas de jóvenes.

El futuro de la Orquesta de Cámara de Bormujos

El maestro Alberto Álvarez Calero, al frente de la Orquesta de Cámara de Bormujos

Los músicos de la OCB son en su mayoría profesores de música, o jóvenes de importante y reconocida trayectoria a pesar de su edad, pero también participan algunos miembros de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla.

El director de la OCB es desde su fundación Alberto Álvarez, que ha debutado como director de ópera en Bulgaria recientemente. En definitiva, esta formación instrumental es una orquesta profesional con nuevos horizontes, a pesar de disponer de un limitado presupuesto.

Cartel promocional del concierto

Más información

 

www.orquestacamarabormujos.es

NdeP

 

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